viernes, 12 de septiembre de 2008


Entonces uno que anda tristón porque aquel ya dio el mal paso, llega a casa de la amiga a la que uno no ve hace tiempo. Que cómo has estado, qué ha sido de ti, quieres un cigarro, mejor algo más fuerte, no te pongas triste, y si te cuento lo que me hizo esa vieja, a mi me hizo lo mismo, ya sabes así son las cosas, tu tranquis, cuentas con la banda, quién crees que se casa, yo no me lo pierdo. Uno va mejor, llega él, hace tiempo que no lo veíamos, quién será esa ella. Pásenle, siéntense, ¿chela? Mejor agua. Te ponemos al corriente, y tu novio, ya no tengo, ya conseguí trabajo, me mudo, a Erick lo asaltaron, seguro eran rocos, lo bueno que no pasó nada, les voy a decir la verdad. Es en ese punto donde todo vale madres. La ella desconocida abre la boca, ni su nombre sabemos Dios nos agarre confesados, -tengo un tumor en la cabeza y me voy a morir.- ¡Carajo! No sé , ni importa, si dijo algo antes o después de eso, ni me acuerdo de lo que pasó. Justo cuando me quería ir, pero qué falta de tacto ponerse mal cuando uno ya se anda poniendo bien. Entonces uno a abrir la boca, hay que evitar ser tomados como discrimitativos o como que nos da igual, puras cosas sabias escupe uno en esos momentos: tranquila, no te deprimas, echale ganas, igual los milagros pasan, vive al máximo lo que te queda, no pierdas el tiempo lamentandote, cuentas conmigo, en lo que pueda ayudarte, todos somos cuates, tu tranquis.




Es así como pasa uno de víctima a hijo de puta superficial que te preocupas por tonterías y te tiras al drama, total si aquel dio su mal paso ps muy él, y por muy jodido que ande uno, uno siempre acaba dando gracias; "finalmente no ando tan mal".